Al día
ITC y Aimplas trabajan para reducir el impacto ambiental de los envases de tintas cerámicas
Gracias al proyecto EcoFILLink, que cuenta con la financiación del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) a través de los Fondos europeos FEDER de Desarrollo Regional, el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC) como entidad coordinadora, con la colaboración del Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas), tratan de reducir el impacto ambiental generado por los envases de tintas utilizados para la decoración de baldosas cerámicas a través de la tecnología inkjet de impresión digital.
El proyecto tiene como objetivos reducir el impacto ambiental generado por el sistema actual de recarga de tintas de las máquinas para la decoración de baldosas cerámicas (inkjet), mediante la implementación de estrategias de ecodiseño en los envases y en la gestión de sus residuos, orientadas a la economía circular. Para conseguirlo, se implementarán diversas técnicas de ecodiseño que permitan que los envases sean reutilizables, y el diseño trenes de lavado que permitan recuperar tintas y materiales valiosos presentes en las aguas residuales que se generen.
Además, estos envases tendrán funcionalidades internas para maximizar su vaciado y para cuando éstos ya no puedan seguir reutilizándose, se optimizará el tratamiento de reciclaje de plásticos contaminados a fin de que tengan un menor impacto ambiental.
Estas medidas serán aplicadas de manera colaborativa y en conjunto con agentes de toda la cadena de valor. Concretamente, las empresas participantes son: Pamesa Cerámica, S.L.; Cottocer, S.L.; Compacglass, S.L.; Keramex, S.A.; TAU Porcelánico, S.L.;Colorobbia España, S.A.; Ravi iniciativas medioambientales, S.L.U.; Rolplas S.L.; Acteco productos y servicios, S.L.; CM Plastik recycling S.L.; Plastire S.A.
ITC-AICE y Aimplas, son conscientes de la importancia de rediseñar un nuevo envase de plástico destinado al almacenamiento y transporte de tintas inkjet, que minimice el impacto ambiental mediante la implementación de diversas estrategias de ecodiseño en los envases y en la gestión de sus residuos orientadas a la economía circular, que permitan la máxima permanencia de los recursos en la economía.
El proyecto propuesto está precisamente pensado para tener una incidencia positiva en los tres ejes del desarrollo sostenible: ambiental, económico, y social y está alineado, claramente, con al menos 5 de los objetivos establecidos por la Organización Mundial de las Naciones Unidas (ONU) en la Agenda 2030 aprobado en 2015.